martes, 18 de septiembre de 2007

.Los insultos, ¿son un indicio de mala educación?

Hola mis amigos lectores. Desde hace mucho tiempo vengo pensando en este tema, y hablándolo
en distintos ámbitos de mi alcance. Ahora me decidí, y lo escribo para darles mi opinión respecto al asunto.

Después de ver el monologo de Pinti, "Salsa Criolla", (y otras cosas que influyeron en mi apertura metal como persona), descubrí que las incorrectamente llamadas "malas palabras" a veces realmente son necesarias de emplear. Un texto escrito con las palabras que emergen de los sentimientos y emociones propias son una prueba fidedigna de la realidad sensitiva que el autor quiere transmitir a sus lectores.

Por supuesto que un texto que dijese algo como:"...Y entonces habría que mandarlos a todos a la mierda, porque son unos hijos de mil puta wijhefijeijfehjsd...", sin dar ningún argumento valedero que sustente una idea, quizás tendría sentido desde un punto de vista artístico. Es decir, la persona que se expresó de esa forma así lo sentía y así lo plasmó.

Además, palabras como "forro, pelotudo, mierda, carajo, hijo de puta" y todas las demás, son palabras que están insertas en nuestro lenguaje y cultura, y por mas que alguien diga que no las debe decir, y que una profesora o un padre castigue a un chico por decirlas, se seguirán diciendo por los siglos de los siglos. Creo que si vamos al punto del tema, emplear insultos en distintas ocasiones de nuestras vidas, no nos va a cambiar para nada. Es más, fíjense, un famoso, renombrado y talentoso escritor argentino, Fontanarrosa, autor de la historieta Inodoro Pereyra(quien falleció hace solo unas semanas), Fontanarrosa asistió a la reunión de la real academia española para decir que estaba de acuerdo con que se agregue la palabra pelotudo(entre otras), como palabra oficial del idioma español. este icono de sobresaliente intelecto y que aporto a nuestra sociedad con humor y ojo crítico el fiel reflejo de la realidad del país, como acabe de decir, propuso la inclusión de la palabra pelotudo al idioma oficial español, argumentando distintas cosas, como que la letra "p" denotaba un especial sonido, entre otros motivos. Ahora, esta persona, quien fue expositor en el III Congreso de la Lengua Española, a quien se le entregó la mención de honor Domingo Faustino Sarmiento por el senado argentino, en reconocimiento a su vasta trayectoria y aportes a la cultura argentina, y quien además era grande y noble como ser humano, defendía y empleaba en seguidas ocasiones en su vida las "malas palabras". Es decir, lo que planteo es: ¿realmente alguien podría llegar a pensar que por el simple hecho de utilizar distintos términos que podrían considerarse como malas palabras, sin irse hacia lo despectivo, podría significar en esa persona la falta de educación...Yo no lo creo...

O como dice Pinti: "si hay algo que no puedo entender es como puede ser que con todas las cosas que pasaron y que siguen pasando, cuatro viejas mal cojidas sigan rompiendo las pelotas con el asunto de las malas palabras. Boludas! Imbéciles! Y cuidado porque no solo las mujeres, también hay muchos forros pelotudos todavía.
¡Manga de pelotudos, tirifilos, mal cogidos, imbéciles y encima burros como pocos! Deberían saber la historia argentina. La historia argentina ha dicho que el profesor inmortal Domingo Faustino Sarmiento tenía una boca de letrina. Ese señor con boca de letrina creo la educación nacional te guste o no, mientras que todos los otros señorones y señoronas que hablaron tan bien y dieron discursos tan pulidos hundieron al país en la indecencia y en la indominia política, pública y privada..y nosotros todavía somo tan pelotudos y tan pajeros de decir:-Es un mal ejemplo para la juventud escuchar las malas palabras..¡Imbéciles reaccionen!¡Pelotudos! Un mal ejemplo para la juventud no son las malas palabras, mal ejemplo para la juventud sigue siendo que un pendejo de ocho años vea que su abuelo o su abuela que laburaron honradamente toda la vida terminan siendo mendigos de mierda por 100 dólares por mes o menos, mientras los que roban y estafan tienen los bolsillos llenos. Eso es mal ejemplo para la juventud, y no mandar a la concha de su madre al que lo hace...pero claro, estamos en el país de la buena educación, estamos en el país en donde la educación es no decir malas palabras, y donde la moral y la ética es no tirarse pedos en público, y cerrar las piernas si sos una señorita, anda a la puta que te parió...

En lo que a mi respecta sobre las "malas palabras" es que hay que usarlas y no ser un alcahuete esquematizado por las reglas formales, que apenas escucha un insulto dice:"hay no! Este hombre es muy mal educado, que poca catadura moral..."
En mi opinión, las "malas palabras" o insultos, deberían ser usados siempre que se requieran, aunque eso implique una frecuencia relativamente alta en el dialogo de una determinada persona, eso sí, siempre y cuando no ofenda a los demás.

Mi propuesta es:
¿Por qué no hacer de la escritura una forma totalmente libre de expresarse, sin importar que tan bien un texto este escrito desde la semántica, la gramática, etc., pero siempre que mas o menos se mantenga una coherencia y lógica, y que no afecte realmente la sensibilidad de los demás o que promulgue ideas que vayan en contra de los derechos humanos o de los animales y el medio ambiente, y que, salvo por la presencia de lo anteriormente mencionado, que ningún tipo de escrito tenga que ser censurado bajo ningún concepto?

2 comentarios:

mario_wolf dijo...

hola kevin solo keria decirte que esta es una muy buena lectura ,impresionante,divertida y muy bien redactada te felivito sigue asi vale ¿¿¿ nos vemos

Anónimo dijo...

Creo que las malas palabras puden ser en algunos casos irremplazables pero, ¿un mundo sin malas palabras no seria un mundo mas respetuoso?¿que pasaria si esa energia que provoca la mala palabra fuera empleada en la creacion de una obra artistica?¿no seria mejor?.Un mundo sin malas palabras significaria un mundo sin irrespetuosidad, camino previo a la paz.
ACLL
www.elblogdeacll.blogspot.com